Los sistemas de HVAC que deben cumplir con requisitos estrictos, y de los cuales se esperan resultados consistentes durante su vida útil, deben ser considerados como sistemas críticos y por lo tanto deberán ser evaluados en función del riesgo y el impacto de las fallas potenciales.
El estudio de las fallas potenciales, permite establecer pautas y procedimientos a seguir en caso de que surja el problema. Muchas veces permite generar incluso una práctica preventiva o de control sobre el parámetro que se determine como crítico al sistema, de manera tal que se evite la falla.
No obstante, consideramos recomendable realizar la valoración de riesgos en la etapa de diseño, teniendo en cuenta que permitirá abordar como parte del proceso, el impacto económico que representan las fallas y evaluar así la posibilidad de redundancia de equipos, stocks de insumos, repuestos, etc.
¿En qué consiste la valoración de riesgos?
La valoración o análisis de riegos, es un proceso que permite evaluar el impacto de un sistema, o parte del mismo, sobre la calidad del producto (en instalaciones farmacéuticas), o en relación al paciente (en instalaciones hospitalarias).
En este aspecto y bajo este concepto, resulta fundamental conocer cuáles son los atributos críticos de calidad que tienen un impacto directo sobre el producto/paciente, y para ello deberemos realizar un análisis previo, que nos permita determinar cuáles son los parámetros críticos del sistema que deberán ser controlados y cuáles son sus límites.
Normalmente en una instalación de hvac, los parámetros críticos estarán asociados a la necesidad de mantener sentidos de flujo de aire (positivos o negativos), presiones diferenciales mínimas, temperatura y humedad ambiente, y en algunos casos de áreas con requisitos de clasificación, la calidad del aire de suministro será de suma importancia para evitar la contaminación.
Para poder mantener ciertas condiciones especiales, los sistemas de hvac, tendrán componentes que serán considerados críticos a la hora de evaluar los puntos de control.
Por ejemplo, cuando la temperatura y la humedad presenten un rango de operación requerido y especificado para mantener una condición, el sistema de climatización, como componente del sistema de hvac en su conjunto, deberá considerarse en el impacto potencial de falla, teniendo en cuenta que ésta podría afectar al producto/paciente.
Entendiendo que los parámetros operan en rangos, un método para la evaluación de los límites podría ser el uso de tablas, que permitan analizar el sistema en pasos:
• Desglosar el sistema en componentes o subsistemas
• Evaluar qué parámetros son críticos
• Evaluar qué componentes impactan directamente en los parámetros críticos
• Establecer los límites de operación (máximos, mínimos)
• Establecer los límites de alerta
• Establecer los límites de alarma
• Determinar el sistema de monitoreo de los puntos críticos de control
• Establecer las pautas para el manejo de desvíos y no conformidades
• Considerar la re-evaluación del sistema
El riesgo asociado a una falla debe ser clasificado de acuerdo al grado del impacto y la probabilidad de ocurrencia, uno de métodos utilizados para esta evaluación son los gráficos de tipo semáforo, con los colores rojo – amarillo – verde, donde el rojo representa un alto riesgo, el amarillo un alerta y el verde la operación adecuada.
Estos gráficos, podrán servir para trabajar en la reducción de los riesgos, actuando sobre alertas y alarmas.
Re-evaluando los parámetros críticos con un riesgo alto en la probabilidad de falla, el cuadro debería cambiar significativamente. Sin embargo, no debe esperarse a la ocurrencia para una próxima evaluación y la planificación en este aspecto resulta recomendable como control.
Cada uno de estos pasos debe establecerse con criterio y posiciones claras y concisas. No perdamos de vista que del análisis de riesgos y la evaluación del impacto saldrán las especificaciones que derivarán en procedimientos y la mala interpretación podrá perjudicar al sistema, recayendo sobre el objetivo de la calidad y sobre todo tendrá un impacto en los costos de retorno y rentabilidad que podría repercutir en el funcionamiento general de las instalaciones.
¿Qué obtengo de la evaluación?
Un análisis de riesgos realizado a conciencia y teniendo en cuenta toda la documentación necesaria como soporte, será útil para efectuar los planes de mantenimiento adecuados, establecer las frecuencias de control, realizar una evaluación estadística de los resultados, aplicar los criterios a la documentación para la calificación de los espacios críticos, y lo más importante para asegurar la operatividad del servicio, es que el análisis de riesgos permitirá realizar las evaluaciones económicas y así poder determinar prácticas que posibiliten generar sistemas de hvac robustos y sustentables así como también optimizar los sistemas existentes.
